Hola a tod@s!
Esta semana continuamos nuestro viaje a las Islas Jónicas con un lugar que seguramente os robe literalmente el corazón nada más poner un pie en él… Kefalonia, un pequeño reducto natural, salvaje y secreto en el que normas no escritas pero respetadas por todos permiten mantener un encanto inquebrantable fuera de las atrocidades de la época moderna. Puede que sea la isla que más nos cautivó de las Jónicas y puede que también nos descubriese que todavía existen lugares capaces de mantenerse prácticamente vírgenes y fieles a sí mismos a lo largo del tiempo, por lo que nos hubiese gustado quedarnos a poder ser para siempre… pero nos tuvimos que conformar con una semana que, a pesar de todo, dio mucho de sí. Esta semana os traigo nuestro diario de viaje de aquellos increíbles días y algunos de sus secretos –no todos-, para que os animéis a descubrir por vosotros mismos sus encantos…
Una semana en Kefalonia

Llegamos a Kefalonia tras unos días intensos y animados en Zakynthos. Cogimos el ferry desde Agios Nikolaos, un pintoresco puerto al norte de Zakynthos, a las 9:45h de la mañana y nos dejó en el puerto de Pessada por 9€ cada uno. El “puerto“ de Pesada era un pequeño embarcadero sin apenas nada alrededor y nada más bajar llegabas a una empinada cuesta llena de buses, taxis y transfers para llevarte a los diferentes rincones de la isla… aquella sencillez y austeridad era el perfecto anticipo de lo que encontraríamos después en Kefalonia. Habíamos reservado taxi con antelación en Kefalonia Taxi, que, además de ser super cómodo por poder seleccionar tu ruta online, nos sorprendió tan gratamente que terminamos por hacer todos nuestros traslados en la isla con ellos: un negocio familiar transmitido de padres a hijos en los que la amabilidad, la profesionalidad y la simpatía eran la seña de identidad de todos los conductores. Además, contaban con pequeños tours para conocer los rincones más bonitos a precios muy razonables. Super recomendables.

Día 1 – Argostoli y El Valle de Omala

Desde el puerto de Pesada hasta Argostoli, capital de la isla, hay poco más de 12 kms, unos 20 minutos en coche.
Argostoli es la zona más moderna y cosmopolita, aunque nos pareció que con un día era suficiente para conocerla. Toda la ciudad se encuentra rodeada por la laguna Koulavos, en el que abundan los patos y los delfines y desde la que se obtiene una primera panorámica espectacular del escenario del alrededor. Cruzando a través de la laguna de aguas transparentes por el Puente Drapano o Puente De Bosset de camino al puerto de los pescadores, además de dar un agradable y romántico paseo por sus 900 metros de longitud, tenemos el aliciente de poder ver a las tortugas Caretta Caretta, que se mueven a sus anchas en su hábitat natural.
Ya en la ciudad, que destaca por su forma de anfiteatro, lo mejor es pasear por el paseo marítimo lleno de palmeras y pavimentado con piedras de colores, o por la calle peatonal Lithostroto en la que se concentran las principales tiendas. En su plaza central, Platia Vallianou, encontraréis decenas de terrazas, bares y restaurantes, en la inmediaciones veréis la Iglesia de San Spyridon y el curioso reloj de la torre de la Plaza Campana, o el Jardín Botánico justo al lado de la plaza. Además, la ciudad cuenta también con museos como el Museo Arqueológico de Argostoli o el museo histórico – etnográfico Korgialenios.

Pero también destacan los alrededores: podéis llegar al Faro de Fanari andando o en bici y parar de camino en las Katavothres, a unos 3 kms. del centro, un fenómeno geológico único formado por el agua del mar que entra entre las rocas y termina desapareciendo en el subsuelo.

Cerca de la ciudad también se puede visitar el colorido pueblo de Faraklata en la ladera de la montaña, o el Castillo Veneciano de Saint George.

Pero sin duda, uno de los grandes atractivos cercanos a Argostoli es el Valle de Omala, donde se encuentran las principales bodegas locales de la isla. Se organizan pequeños tours o actividades para conocer de cerca la fabricación de jabones artesanales a partir de la miel de abeja, y es una zona perfecta para pasar media jornada (más info acerca de tours y excursiones en Kefalonia Wine Tour o Elitiko)

Para disfrutar del tiempo de ocio en Argostoli:
- Restaurante Kiani Akti, con mesas en el muelle del puerto, con pescados y mariscos frescos y bonitas vistas, en I. Metaxa, Argostolion.
- Casa Grec, un restaurante precioso y decorado al detalle en el que destaca tanto la comida (una carta que combina cocina tradicional griega con cocina internacional), como la terraza a diferentes alturas y también su vino local. En la calle Metaxa Stavrou, 10
- Il Borgo, ideal para cenar con la puesta de sol y para momentos más especiales, en el Castillo de Saint George.
- Bee’s Knee’s the Bar, uno de los bares más famosos de la zona, con buenos cocktails y un ambiente muy animado, en la calle Geroulanou, 12.
Y un alojamiento: os recomiendo el Tourist Hotel, justo en el puerto y con un precio super interesante (unos 60€ la noche), o reservar un apartamento como este tan bonito que vimos en AirBnb por 59€ la noche.
Día 2 – Paliki y Lixouri

Empieza lo bueno!! Nos movemos a la península de Paliki, donde poder disfrutar de unas playas alucinantes y de aguas totalmente cristalinas a lo largo de su costa como Fteri, Amidi, Vouti, o Petani… nos dejaron casi sin palabras! Especialmente Vouti Beach, que por el hecho de estar un poco más escondida puede que sea la playa más tranquila y menos concurrida de todas, incluso en pleno Agosto!

Si no queréis pasar el día entero en la playa, podéis reservaros unas horas para visitar Lixouri, una ciudad reconstruida tras el terremoto de 1953 con mucha animación alrededor de su plaza principal y con atractivos como la Iglesia de Agios Charalampos o las ruinas de Pali. Además, desde Lixouri se alquilan barcos para navegar por el golfo y poder acceder a playas como Xi Beach o Platia Ammos. Para finalizar nuestro segundo día en la isla, nos recomendaron un plan super romántico: ver la puesta de sol y la salida de la luna desde Lepeda Beach.
Día 3 – Myrtos Beach

Esta galardonada playa – de la que dicen que probablemente sea la mejor de Grecia y unas de las mejores del Mundo- es el máximo reclamo de Kefalonia y merecía un día completo para visitarla. Sus aguas son literalmente como las de una piscina y se encuentran rodeadas de dos grandes montañas desde las que se disfrutar unas panorámicas espectaculares de la playa desde sus 900 metros de altura. Llegar a ella no es fácil y el camino es arenoso y empinado, pero una vez allí bañarse en esas aguas y después relajarse en su blanquísima arena es toda una recompensa. Se puede acceder a ella desde diferentes puntos de la isla (si no vais en coche, hay autobuses que bajan varias veces a la playa desde Divarata)
Días 4 y 5 – Assos

El plato fuerte de nuestro viaje se concentraba en esta etapa: desde que vimos la imagen del pueblo de Assos nos enamoramos perdidamente de él, una pequeña y preciosa aldea con casitas pintadas de colores y llena de flores totalmente rodeada de playas transparentes y con el aliciente de estar al lado (a menos de 12 kms.) de la impresionante Myrtos Beach. Organizamos todo para poder visitarla y quedarnos allí un par de días a disfrutar de su autenticidad.
Lo que más nos sorprendió de ella fue que era totalmente familiar: una localidad muy pequeñita con apenas 4 o 5 restaurantes donde los griegos se quedaban a veranear, y donde de verdad se podía desconectar y te dedicabas solo a disfrutar. Pasamos momentos inolvidables allí, descubrimos calitas secretas en las que estábamos solos y comimos platos locales deliciosos. La experiencia de estar de vacaciones en mayúsculas.
En Assos, las opciones de restauración son limitadas. Hay un restaurante bastante reconocido llamado Platanos, estaban el Nefeli Anait y la Taverna Molos… pero nosotros pasábamos prácticamente todos los días en el Assos Blue Cafe, una especie de bar-restaurante a la orilla de la playa que estaba siempre animado y en el que se podía hacer de todo a todas las horas del día: desde desayunar, tomar una cerveza, picar algo, comer, cenar… por lo demás, el pueblo se recorre en medio día y nosotros también hicimos la caminata (en cuesta) al Castillo de Assos, con unas impresionantes vistas de la zona y de las playas desde las alturas.

Alojamiento: nosotros nos alojamos en el Vassilis Retreat, en un apartamento con unas vistas privilegiadas del pueblo super tranquilo y acogedor. El precio por noche eran unos 80€ y desayunar en la terraza cada mañana era un auténtico regalo. Además, tenía un precioso patio- chill out con piscina para disfrutar de la caída del sol por la tarde. Si alguna vez volvemos a Assos, seguro que repetiríamos.
Día 6 – Erissos

Tomando rumbo Norte desde Assos, el área de Erissos concentra varios puntos de interés como el ajetreado puerto de Fiskardo super animado y cosmopolita, las playas de Dafnoudi, Kimilia, Emplisi o Foki, o el bonito pueblo de Agia Sofía con sus vistas privilegiadas de Ítaca.
En esta etapa del viaje, podéis elegir entre Fiskardo o Agia Sofía para alojaros, nosotros elegimos Fiskardo por las playas de los alrededores y por su animación, posibilidades de ocio y restauración. Para alojaros en Fiskardo, quedaros en el Emelisse Nature Resort, estaba a 3 minutos andando de la playa de Emplisi, en una zona rodeada de cedros y cipreses. Unos 150€ la noche.
Día 7 – Sami

La última etapa del viaje la reservamos para conocer la zona sur este de la isla, la región de Sami. Desde la ciudad de Sami parten caminos para visitar la acrópolis pero nosotros no los hicimos por falta de tiempo, lo que sí pudimos es conocer a fondo la ciudad y su puerto (donde se rodaron escenas de la película La Mandolina del Capitán Corelli) y la espectacular Playa de Antisamos, super tranquila e ideal para hacer un poco de snorkel.
Desde Sami, cogimos una excursión para visitar las famosas cuevas de Drogarati y Melissani:
- A Melissani se la conoce como “la cueva de las Ninfas“ ya que según la mitología griega era donde éstas habitaban, y es un lugar paradisiaco formado de restos karsticos protegida por árboles y vegetación. Durante los meses de Julio y Agosto, el color de sus aguas cambia de color por el efecto del sol y llena las paredes de roca de luz, ofreciendo un espectáculo único que merece la pena ver.
- Drogarati, por su lado, son un conjunto de cuevas llenas de estalactitas y estalagmitas que pueden visitarse en un recorrido más o menos corto en el que se suben y bajan unas cuantas escaleras.
También pueden hacerse otras actividades como senderismo (hay caminos hacia Karavomylos , hacia la aldea abandonada de Old Vlachala o senderos como 7 Waters Mills Trail con unas vistas alucinantes de los paisajes y de las ruinas de los alrededores de Sami), rutas a caballo, trekking.. e incluso, si tenéis tiempo suficiente, la compañía Sami Star hace excursiones a Ítaca visitando sus playas, Vathi y Kioni.
Para disfrutar del tiempo de ocio en Sami:
- Mangiare, un restaurante en la playa en el que sirven unos souvlakis maravillosos.
- Kallithea, con sus vistas imbatibles y una moussaka para chuparse los dedos.
- Stoa, al lado del puerto, para alucinar con sus tartas caseras (la de manzana está espectacular) y tomar un café
- Melissani Taverna, un restaurante tradicional con una preciosa terraza ajardinada y pescado fresquísimo
- En la Playa de Antisamos, el Beach Bar Mojito es ideal tanto para comer como para tomar un cocktail o una copa junto al mar.

Y un alojamiento: los Estudios Antisamos están en pleno puerto y al lado de todos los bares y restaurantes de Sami. Hay tanto estudios como apartamentos y los precios empiezan en los 45€ por noche.
Una semana se queda corta para disfrutar de todos los secretos de Kefalonia, no creéis? Espero que os haya gustado tanto como como a nosotros!
Hasta la semana que viene
xxx
E
Hi everybody!
This week we continue our trip to the Ionian Islands with a place that will literally steal your heart as soon as you set foot in it … Kefalonia, a small natural, wild and secret stronghold in which rules not written but respected by all allow keep an unbreakable charm out of the atrocities of the modern era. It may be the island that most captivated us of the Ionian and may also be discovered that there are still places capable of remaining virtually virgin and true to themselves over time, so we would have liked to stay to be able to be forever … but we had to settle for a week that, despite everything, gave a lot of itself. This week I bring you our travel diary of those incredible days and some of its secrets -not all-, so that you are encouraged to discover for yourself their charms …
A week in Kefalonia

We arrived in Kefalonia after a few intense and lively days in Zakynthos. We took the ferry from Agios Nikolaos, A picturesque harbor north of Zakynthos, at 9:45 in the morning and left us at the port of Pessada for € 9 each. The «port» of Pesada was a small pier with hardly anything around and just down came to a steep slope full of buses, taxis and transfers to take you to different corners of the island … that simplicity and austerity was the perfect advance of what we would find later in Kefalonia. We had booked a taxi in advance at Kefalonia Taxi, that, in addition to being super comfortable to be able to select your route online, we were so pleasantly surprised that we ended up doing all our transfers on the island with them: a family business transmitted from parents to children in which kindness, professionalism and sympathy They were the hallmark of all the drivers. In addition, they had small tours to know the most beautiful places at very reasonable prices. Super recommendable.

Day 1 – Argostoli and Omala Valley

From the port of Pesada to Argostoli, capital of the island, there is little more than 12 kms, about 20 minutes by car.
Argostoli is the most modern and cosmopolitan area, although we felt that one day was enough to get to know it. The whole city is surrounded by the Koulavos lagoon, where ducks and dolphins abound and from which a first spectacular panorama of the surrounding scenery is obtained. Crossing through the lagoon of transparent waters by the Drapano Bridge or De Bosset Bridge on the way to the fishermen’s harbor, besides giving a pleasant and romantic walk for its 900 meters in length, we have the incentive to see the Caretta Caretta turtles, who move at ease in their natural habitat.
Already in the city, which stands out for its amphitheater shape, it is best to walk along the promenade full of palm trees and paved with colored stones, or the pedestrian street Lithostroto in which the main stores are concentrated. In its central square, Platia Vallianou, you will find dozens of terraces, bars and restaurants, in the vicinity you will see the Church of Saint Spyridon and the curious clock tower of the Campana Square, or the Botanical Garden right next to the square. In addition, the city also has museums such as the Archaeological Museum of Argostoli or the historical-ethnographic museum Korgialenios.

But they also highlight the surroundings: you can reach the Fanari Lighthouse by foot or by bike and stop on the way in the Katavothres, about 3 kms. from the center, a unique geological phenomenon formed by the sea water that enters between the rocks and ends up disappearing in the subsoil.

Near the city you can also visit the colorful village of Faraklata on the mountainside, or the Venetian Castle of Saint George.

But without a doubt, one of the great attractions near Argostoli is the Omala Valley, where the main local wineries of the island are located. Small tours or activities are organized to learn about the manufacture of handmade soaps from honey, and it is a perfect area to spend half a day (more info about tours and excursions in Kefalonia Wine Tour or Elitiko)

To enjoy the leisure time in Argostoli:
- Restaurante Kiani Akti,with tables on the pier of the port, with fresh seafood and nice views, in I. Metaxa, Argostolion.
- Casa Grec, a beautiful restaurant decorated in detail that highlights both the food (a menu that combines traditional Greek cuisine with international cuisine), as well as the terrace at different heights and also its local wine. On Metaxa Stavrou Street, 10
- Il Borgo,ideal to dine with the sunset and for more special moments, in the Castle of Saint George.
- Bee’s Knee’s the Bar, one of the most famous bars in the area, with good cocktails and a very lively atmosphere, on Calle Geroulanou, 12.
Accomodation: Tourist Hotel, right in the harbor and with a super interesting price (about € 60 a night), or book an apartment like this we saw on AirBnb for € 59 a night.
Day 2 – Paliki and Lixouri

The good starts! We move to the Paliki peninsula, where you can enjoy stunning beaches and crystal clear waters along its coast as Fteri, Amidi, Vouti, or Petani … will leave you speechless! Especially Vouti Beach, which due to being a bit more hidden may be the quietest and least crowded beach of all, even in the middle of August!

If you do not want to spend the whole day on the beach, you can reserve a few hours to visit Lixouri, a city rebuilt after the earthquake of 1953 with much animation around its main square and attractions such as the Church of Agios Charalampos or the ruins of Pali. In addition, from Lixouri boats are rented to navigate the gulf and access to beaches such as Xi Beach or Platia Ammos. To finish our second day on the island, they recommended a super romantic plan: watch the sunset and the moonrise from Lepeda Beach.
Day 3 – Myrtos Beach

This awarded beach – which they say is probably the best in Greece and one of the best in the world – is Kefalonia’s top attraction and deserved a full day to visit. Its waters are literally like those of a swimming pool and are surrounded by two large mountains from which spectacular views of the beach are obtained from its 900 meters high. Getting to it is not easy and the road is sandy and steep, but once there to bathe in those waters and then relax in its white sand is a reward. You can access it from different points of the island (if you do not go by car, there are buses that go down several times to the beach from Divarata)
Days 4 & 5 – Assos

The highlight of our trip was concentrated in this stage: since we saw the image of the town of Assos we literally fell in love with it, a small and beautiful village with colorful painted houses and full of flowers surrounded by transparent beaches and with the incentive to be next (less than 12 kms.) from the impressive Myrtos Beach. We organize everything to visit it and stay there a couple of days to enjoy its authenticity.
What surprised us most about it was that it was totally familiar: a very small town with only 4 or 5 restaurants where the Greeks stayed for summer, and where you could really disconnect and devote yourself just to enjoy. We spent unforgettable moments there, we discovered secret coves in which we were alone and ate delicious local dishes. The experience of being on vacation in capital letters.
In Assos, the restoration options are limited. There is a well-known restaurant called Platanos, the Nefeli Anait and the Taverna Molos … but we spent practically every day at the Assos Blue Cafe, a kind of bar-restaurant on the edge of the beach that was always lively and where you could do everything at all hours of the day. day: from breakfast, have a beer, snack, eat, dine … otherwise, the town is covered in half a day and we also did the hike (in slope) to the Castle of Assos, with stunning views of the area and the beaches from the heights.

Accomodation: we stayed at Vassilis Retreat, in an apartment with privileged views of the village super quiet and cozy. The price per night was about € 80 and having breakfast on the terrace every morning was a real treat. In addition, it had a lovely patio-chill out with pool to enjoy the fall of the sun in the afternoon. If we ever go back to Assos, I’m sure it would repeat.
Day 6 – Erissos

Moving to the North from Assos, the Erissos area concentrates several points of interest such as the busy port of Fiskardo, super animated and cosmopolitan, the beaches of Dafnoudi, Kimilia, Emplisi or Foki, or the pretty village of Agia Sophia with its privileged views of Ithaca .
At this stage of the trip, you can choose between Fiskardo or Agia Sofia to stay, we choose Fiskardo for the surrounding beaches and for its entertainment, leisure and restoration possibilities. To stay in Fiskardo, we chose Emelisse Nature Resort, it was 3 minutes walk from Emplisi Beach, in an area surrounded by cedars and cypresses. About € 150 a night.
Day 7 – Sami

The last stage of the trip is booked to get to know the south east area of the island, the Sami region. From the city of Sami, there are ways to visit the Acropolis but we did not do it due to lack of time. What we could do is to get to know the city and its port (where scenes from the film The Captain Corelli’s Mandolin were filmed) and the spectacular Antisamos beach, super quiet and ideal for a little snorkeling.
From Sami, we took an excursion to visit the famous caves of Drogarati and Melissani:
- Melissani is known as «the cave of the Nymphs» since according to Greek mythology was where they lived, and is a heavenly place formed by karstic remains protected by trees and vegetation. During the months of July and August, the color of its waters changes color due to the effect of the sun and fills the rock walls with light, offering a unique spectacle that is worth seeing.
- The Drogarati cavesare a set of caves full of stalactites and stalagmites that can be visited in a more or less short route in which they climb up and down a few stairs.
You can also do other activities such as hiking (there are roads to Karavomylos, towards the abandoned village of Old Vlachala or trails such as 7 Waters Mills Trail with amazing views of the landscapes and ruins surrounding Sami), horse riding, trekking .. and even, if you have enough time, Sami Star organizes excursions to Ithaca visiting its beaches, Vathi and Kioni.
To enjoy the leisure time in Sami:
- Mangiare, a restaurant on the beach where they serve some wonderful souvlakis.
- Kallithea, with unbeatable views and a moussaka to suck your fingers.
- Stoa, next to the port, to enjoy their homemade cakes (the apple is spectacular) and have a coffee
- Melissani Taverna, a traditional restaurant with a beautiful garden terrace and fresh fish
- In Antisamos Beach, Mojito Beach Bar is perfect both for eating and for a cocktail or a drink by the sea.

And where to stay in Sami: Antisamos Studios are located in the port next to all the bars and restaurants of Sami. There are both studios and apartments and prices start at € 45 per night.
One week falls short to enjoy all the secrets of Kefalonia, do not you think? I hope you liked it as much as we did!
Until next week
xxx
E
Pingback: The Cuban Keys – Trippingbites